"Debate" final...Hirsch

Enojado llegó Tomás Hirsch luego de que el CEP lo ninguneara con un escuálido 2%. Después de haber proclamado su indignación a los cuatro vientos, Tomás, supongo, llegó en auto no en micro ;)- a Casa Piedra dispuesto a descargar su ira... y se notó.

Vestido con chaqueta café, camisa azul y corbata roja, Tomás entró con rostro adusto y tenso, lejos del Tomás que cautivó a tantos y que El Mercurio tituló como estrella emergente. Definitivamente le acomoda más el formato de podio que el de mesa-entrevista-de-trabajo-con-el-gerente y se notó incómodo sin el uso de sus manos y brazos.

Hirsch abrió nuevamente los fuegos.

Perú. Sacó a relucir su experiencia como embajador y cayó en lo mismo que después lo haría Bachelet: lenguaje complejo para la masa ¿en serio cree que la gente sabe la diferencia entre los tratados de 1952 y 1954? (el del `52 fue una declaración, Sr. embajador, no un tratado). Acertó al recordar que fue el primero en criticar la actuación del gobierno, en especial el trío (perdonen la licencia) de payasos que son Walker, Puccio y Vidal. ¡Llevar el asunto de Perú a la OEA cuando llevamos casi 100 años diciéndole a Bolivia que su reclamo es bilateral, pelmazos!. Criticó el manejo del caso Fujimori y afirmó que habría preferido expulsarlo a Perú. Pero su coherencia se vino al suelo cuando Buitrago le recordó la llegada de Honecker a Chile, se limitó a decir que "Es totalmente distinta la situación, creo que no hay que confundirse" y evadió la pregunta. Mal por él, poco inteligente.

CEP. Desacreditó al CEP acusándolo de manipulación de datos, recordó lo poco que le proyectaban en las municipales y publicó los nombres del directorio: "Primero, Matte. Eleodoro Matte es el presidente. Y despupes están Andrónico Luksic. ¿Lo ubican? El que está buscado en Perú. Angelini, Juan Claro, Bruno Phillipi, el de la Sofofa, Büchi, Marcos Büchi. Toda una lista de grandes y poderosos grupos económicos que están en el CEP". Aunque es un argumento que no apruebo en lo absoluto, en términos de imagen fue una jugada brutalmente buena. Debió emplazar al directorio del CEP a una apuesta tipo "me rapo en la plaza de la Constitución si saco el porcentaje de votos que me asignaron dentro del margen de error, de lo contrario se disculparán públicamente". Para rematar por el poco apoyo mostrado en la encuesta, dijo otra frase para el recuerdo: "Voy a decir que a la única encuesta que le creo es a la que está en el corazón de la gente y que se expresa en el voto el 11 de diciembre"

Desigualdad y exclusión. En su lógica contestataria, Hirsch disparó contra los empresarios y su apoyo a Lagos, diciendo que mientras el empresariado aplaude a Lagos, él escucha algo distinto. Además agregó un componente emocional al afirmar que "existe mucho maltrato", apeló a lo emocional de un modo distinto a los demás. En lo sustantivo, dijo poco, muy poco.

Inmigrantes y desempleo. Me leyó el pensamiento al partir su intervención diciendo "yo creo que decir que hay medio millón de cesantes por los inmigrantes es una aseveración muy irresponsable", Bustamante recula replicando que no es el espíritu de la pregunta y Hirsch se largó con un minidiscurso de creación de trabajo y el correspondiente ataque al gobierno al recordar el préstamo que hizo el Bancoestado-los-patitos a Luksic para comprar bancos. En la contrapregunta -específicamente empleadas domésticas y construcción- se fue por la tangente de la integración con América Latina... pero de la inmigración ilegal, ni rastro.

Matrimonio homosexual. Está abierta y totalmente de acuerdo. Pese a que no comparto en lo absoluto su posición, uno de sus argumentos no deja de tener algo de razón: el Estado no puede entrometerse en la vida privada de las personas.

Tratado de Libre Comercio. Aunque tiene el discurso de ultraizquierda, no apeló a él y me sorprendió: indicó el temor de pymes textiles ante el TLC con China y propuso protección para ellas y que las empresas extranjeras paguen impuestos al igual que las nacionales.

Mejor idea de otro y la más demagógica. Mencionó la igualdad de pensiones entre hombre y mujer propuesta por Bachelet y lo más frontal vino a continuación: "A la derecha, de pronto, hablando como si fueran las hermanitas de la caridad, de los pobres, de que van a resolver todos los problemas de Chile, a un candidato que es uno de los hombres más millonarios de Chile y del continente, cuando un día le escuché decir que en realidad él era también un micro y pequeño empresario, francamente si todos los microempresarios estuvieran como él, creo que estaríamos en otra. Eso es demagogia, pero no sólo demagogia, eso es faltarle el respeto a la gente, faltarle el respeto justamente a los micro y pequeños empresarios. Decir, por ejemplo, que las grandes salmoneras, las grandes industrias han traído beneficios, cuando a sus trabajadores se les está pagando sueldos miserables, porque aparte de los 500 mil cesantes, hay más de dos millones que reciben sueldos de hambre hoy día en Chile". En la contrapregunta apareció el amigo de Chávez a decir que fue valorado en Mar del Plata y que fueron a enterrar el ALCA ¿pretenderá que la gente sabe qué es el ALCA y su diferencia con el ALBA planteado por Chávez? ¿y usted?...

Promesas ¿Por qué creer en el candidato? Reiteró el temor de la gente que provoca perder trabajo, enfermarse, etc. "Esta es una sociedad que está tratando muy mal a su gente" fue la frase para el recuerdo, la apelación a lo emotivo. Se hizo eco de la pregunta de la UDI "y tú cómo estás? en otro formato... ahora entiendo el intercambio de lemas.

Mensaje final. En un acto de temeridad, afirmó que él era el único voto útil, reflotó el tema de los derechos humanos y que los demás, después de 32 años no han hecho nada... en fin.

Conclusión

Hirsch, sin el factor sorpresa, no estuvo tan bien como en el anterior. Su lenguaje no verbal delató la incomodidad del formato y enojo por las noticias matutinas. Lo traicionaron sus emociones, aunque no lo suficiente como para que se saliera del formato. El objetivo, al parecer era fortalecer su imagen alternativa con propuestas, pero sus palabras finales conspiraron contra esa meta. El uso de la ironía fue moderado, aunque no logró ser lo suficientemente fina como para sentirse cómplice de ellas. (Foto: Emol)

Mañana Lavín.

Saludos a todos,